El Circuito Provincial de Rutas y Senderos 2016 vivió el pasado fin de semana una intensa actividad con la celebración de dos nuevas salidas que tuvieron como escenarios Macael y Tíjola. En el caso de Macael, la ruta se realizó en horario nocturno, dentro de los ‘Senderos de Luna Llena’. Medio centenar de participantes iniciaron el recorrido frente al Ayuntamiento de Macael y desde este punto descendieron a la Rambla por unas escaleras, siguiendo otros 800 metros en sentido descendente.
Posteriormente, abandonaron la rambla para ascender al Cerro Ocara, primero por una pista y más tarde por un sendero. Al llegar a la cuerda siguieron paralelos a ella por un sendero, tras asomarse a un espectacular mirador que junto a unas antenas se eleva sobre el pueblo. Tras alcanzar la pista del Camino de las Majaicas se volvieron a desviar por un sendero que desciende al Paraje del Canfornal. Tomaron una pista que en dirección norte se dirige hacia la Rambla del Barranco Alegre, para ya cerca de él, girar hacia el Este paralelos la rambla, que más tarde cruzaron. Tras pasar junto al Cerro del Nacimiento, la pista acaba desembocando en la citada rambla, que siguieron hasta su confluencia con la del Arroyo Macael, que tomaron en sentido ascendente para regresar al punto de inicio.
La segunda ruta se celebró en Tíjola con la participación de 85 senderistas que completaron un recorrido de 10 kilómetros y dificultad media en el que emplearon tres horas y media. El grupo tuvo como punto de encuentro el Pabellón de Deportes del municipio de Tíjola, desde donde se desplazaron a la periferia del pueblo por una senda entre pinos hasta llegar al Calvario. Abandonaron el casco urbano para continuar por una vereda hasta llegar a la Trinchera Colorá y Tíjola la Vieja.
Desde aquí continuaron por un camino de tierra hasta la Cueva de la Paloma. Atravesaron el Salto del Caballo hasta llegar al alto de la Cerrá de donde se observa la altura de la misma, y desde allí buscaron el cauce del Río Bacares para disfrutar de toda su hermosura. Por discurrir entre paredes tan verticales, encajonado, las rocas calcáreas son como esponjas que almacenan parte del agua y el río crea un microclima en toda la zona que incluso en los meses más secos mantiene una flora en la que predominan cada vez más las adelfas y las zarzas. Destaca un antiguo molino, junto al puente-pozo que hace unos años abastecía de agua potable a Tíjola. La ruta continúa por el Paraje la Tejera y el Cortijo Aldeire hasta llegar a la Ermita de El Salvador. Finalmente, se inició el regreso por la avenida del Socorro hasta llegar de nuevo al Pabellón de Deportes.