El Plan de Fomento de Empleo Agrícola (PFEA), comúnmente conocido por PER, ha sido y es una herramienta muy importante para nuestros municipios. Históricamente se ideó como una herramienta para evitar el despoblamiento de los municipios de interior, que basaban su riqueza en la producción agrícola, proporcionándoles un complemento de renta en épocas de escasa o nula oferta de empleo agrario.
En demasiadas ocasiones ha sido criticado, sobre todo fuera de Andalucía y Extremadura, por personas que demuestran el más absoluto desconocimiento. El PFEA debe de ser defendido y promocionado por todos los que tenemos algún grado de responsabilidad en su gestión.
El trabajador del PFEA no es un ocioso que pasa su jornada laboral sin producir, ni mucho menos. Los trabajadores del PFEA son los que actualmente están haciendo que nuestros municipios puedan realizar esas pequeñas obras que mejoran los mismos. Estas obras en su mayoría están ejecutadas con el Programa de Garantía de Rentas.
Otras obras son ejecutadas dentro del Programa de Empleo Estable que busca la creación de infraestructuras que posibiliten el asentamiento de actividades productivas generadoras de empleo.
Pero no todo queda aquí sino que también se ejecutan, con cargo a estos programas, obras de mejora de colegios que vienen a suplir la faltas de inversión en los mismos y que solo buscan que nuestros hijos tengan unas condiciones dignas durante sus horas de enseñanza.
La inversión que se ha producido, y se esta produciendo, en la provincia con el PFEA 2012 es de 12.378.790,57 €. Toda esta inversión va directamente a los municipios, por las obras ejecutadas, y a los desempleados, por las peonadas echadas. Por lo expresado, queda claro que la Diputación ejerce un gran trabajo de apoyo y gestión para los municipios ya que a cambio de esta inversión millonaria los Ayuntamientos solo aportan 135.287,33 €.
Por lo expresado debemos de levantar la voz en defensa de nuestros desempleados agrarios y de las inversiones en nuestros municipios. Pero, además, esta subvención la podemos calificar de importante, en razón a su cuantía y número de trabajadores beneficiados (12.378.790,57 € y aproximadamente a unos 3.500 trabajadores), ejemplo de colaboración entre administraciones (el Estado hace la aportación económica del 100 % de la mano de obra, la Junta de Andalucía el 75 % de los materiales, los Ayuntamientos el 8 % para costes no salariales y la Diputación el 25 % de los materiales, la encomienda de la gestión del PFEA y los fondos para la contratación del Servicio de Prevención ajeno, que este año ha supuesto unos 90.000 €) y eficaz (este año se ha ejecutado un 99,9 % de lo proyectado).
Soy consciente de que asumo una gran responsabilidad que debo de gestionar con prudencia, eficacia y justicia. Pero la labor de todos, SEPE, Junta, Diputación y Ayuntamientos, es difundir los beneficios que el PFEA esta produciendo en los trabajadores y en los municipios porque la difícil situación por la que estamos atravesando esta produciendo que las únicas inversiones que se están ejecutando en muchos de nuestros pueblos sean precisamente las obras con cargo al PFEA y los Planes Provinciales de Obras y Servicios de la Diputación Provincial.
Si mejoramos las infraestructuras de nuestros pueblos invirtiendo 12.378.790,57 €, damos trabajo a más de 3.500 trabajadores, creamos infraestructuras para la creación de empleo, colaboramos todas las administraciones y ejecutamos el 99,9 % de lo proyectado, ¿por qué tiene tan mala imagen el PER? Sin duda, por desconocimiento.