El gastroturismo está de moda y buena muestra de ello es la afluencia de visitantes que año a año acuden a los templos de la buena mesa.
Dentro de este arte de la cocina destaca la importancia de aceite, siendo imprescindible que el mismo desborde calidad y tenga una marca de distinción que lo haga único.
La provincia de Almería, por su ubicación geográfica y sus condiciones climatológicas, es un lugar idóneo para la producción de óleo y buena muestra es la existencia de diferentes empresas dedicadas a esto que, además, exportan por todo el mundo el producto logrado.
El resultado de las horas de trabajo y concienzudos estudios de mejora de la calidad del producto, han hecho que el aceite sea de baja acidez, un sabor especial y sobre todo, que se haya convertido en una referencia a la hora de seleccionar las rutas que repasen la tradición gastronómica de la provincia.
Ya dependiendo del que sea seleccionado por el consumidor se encuentran el usado para las ensaladas o las tostadas del desayuno, por ejemplo, que es el más indicado para consumo en crudo, pero también los que son especiales para cocinar, freír, etcétera. Variedades hay como gustos. Diferentes estudios han concretado que el aceite es muy recomendable porque contiene una alta cantidad de antioxidantes naturales.
La producción de aceite no está concentrada en un único núcleo, en una sola empresa. Son varias las que desarrollan una importante labor que, además de la venta y promoción turística, buscan constantemente la mejora para conseguir el máximo bienestar en sus clientes potenciales. Ubicadas en zonas de un marcado contraste geográfico, como son los aires de la sierra o del desierto o también del suave levante almeriense. La existencia de las almazaras es un importante aval a la hora de enviar o concertar las visitas de gastroturismo.
Las almazara de Canjáyar, situada en zona de sierra como la Alpujarra almeriense en el Valle del Andarax, produce un aceite que ellos mismos definen como “fruto del esfuerzo y sabiduría del campo y de más de 10.000 agricultores”. Todos los procesos hasta la llegada del oro líquido son cuidadosamente llevados a cabo para que el mismo no pierda en ningún momento sus propiedades. Uno de los secretos es la combinación de varios tipos de aceituna, que le otorgan un sabor delicado, lleno de aromas y matices, lo que da al resultado final una variedad de productos que ha posicionado a esta almazara alpujarreña como referente nacional para aquellos que entienden de la producción aceitera en España.
Se ha convertido en una referencia más que destacada a la hora de promocionar el aceite en la provincia de Almería y es que cuenta con características que lo han convertido en puntero a la hora de hablar tanto de consumo en el hogar como de abastecimiento para locales de hostelería, ofertando en su página web www.laalmazara.com un esmerado diseño de envases, incluyendo la monodosis valida para dispensar en restaurantes y bares.
Su responsable, Manuel Calvache, reconoce que los sistemas de producción generan interés “tanto en la visitas de turistas, dentro de las rutas que hacen por la Alpujarra como a centros educativos, que también vienen durante el curso escolar”. En esas visitas a la almazara “les enseñamos todo el proceso de producción y la verdad es que todos ponen mucho interés y nos formulan preguntas sobre el trabajo en campaña o los tipos de aceituna”.
Otra de las empresas que destaca por la producción de aceite en Almería y que además cuenta con extraordinarias referencias a nivel nacional e internacional es Castillo de Tabernas. Enclavada en el municipio que le da el nombre, reúne las condiciones esenciales para convertirse en un aceite con características propias para atraer tanto a los consumidores potenciales como a los gastroturistas. Hay que recordar que el entorno de Tabernas, con ambiente desértico, es uno de los más punteros para el cultivo del olivo. La producción es cien por cien propia, con plantaciones, almazara y comercialización con la marca. En este mismo municipio se fabrica Oro del Desierto, un producto que se comenzó a elaborar por un aceite ecológico de última cosecha y que ha conseguido más de 40 distinciones y premios a nivel internacional, en países como Estados Unidos, Italia o Francia. Los Vergeles de Moraila, también en Tabernas, ofrece al público una selección gourmet y una amplia variedad de formatos que recogen una producción basada en una cuidadosa recolección de las aceitunas que se realiza mano a mano y en su momento óptimo.
Campos de Uleila recibe su nombre del municipio de Uleila del Campo, y también produce aceite de magnífica calidad con denominación almeriense. Buenas condiciones de clima y de cultivo lo convierten en muy demandado por los consumidores habituales pero también por parte de aquellos que a la hora de adentrarse aún más en la cultura española, pretenden conocer más a fondo uno de los pilares como es el gastronómico.
La Almazara de Lubrín recoge la tradición en el sector del aceite de este municipio, a través de la experiencia del promotor Rafael García. Su producto tiene unas condiciones organolépticas, debido a la climatología especial de este pueblo, con muchas horas de sol y una cercanía con el Mediterráneo que le hacen tener un sabor especial.
En este sentido, el Servicio Provincial de Turismo de la Diputación de Almería por medio de su diputado, Javier A. García, ha destacado la importancia de potenciar “el gastroturismo, ya que está demostrado que este tipo de visitas, además de tener más demanda, ofrece la posibilidad a las localidades de destino para promocionar su producto por todo el mundo ya que no hay que olvidar que los turistas proceden no únicamente del territorio nacional, sino de fuera del mismo también en alto número”. Además, el diputado ha destacado el poder adquisitivo y el gasto por persona que realizan los turistas de este segmento.