El Patio de Luces de la Institución Provincial se llenó anoche del duende que convierte al flamenco en un arte tan especial con el emotivo homenaje que se le brindó al cantaor jerezano Antonio Chacón y los cantes de Almería, coincidiendo con el 150 aniversario de su nacimiento. La Diputación Provincial, el Ayuntamiento de Almería y la Peña El Taranto se han unido para rememorar el estrecho vínculo de Chacón con los cantes de Almería.
Diputación, Ayuntamiento de Almería y la Peña El Taranto se unen para evocar la figura del cantaor jerezano con un coloquio ilustrado con el cante de Calixto Sánchez
El acto ha consistido en una mesa redonda en la que se ha analizado la aportación de Chacón a los cantes minero – levantinos. Han intervenido los expertos José Antonio López Alemán, Calixto Sánchez y Antonio Zapata Roldán. El coloquio ha estado ilustrado por el cantaor Calixto Sánchez, acompañado por el guitarrista Eduardo Rebollar.
El diputado de Cultura y Cine, Manuel Guzmán, ha dado la bienvenida al público y a los participantes en el homenaje y ha manifestado que “las puertas de la Institución Provincial están abiertas a la cultura y a este tipo de iniciativas que ahondan y ensalzan nuestra vinculación con un arte como el flamenco”, y ha añadido que “uno de los principales objetivos de la Diputación reside en preservar y difundir nuestras tradiciones, y el flamenco entronca de lleno con esta premisa”.
Chacón viajó hasta Almería para escuchar entonaciones de El Ciego de la Playa, y, a partir de ahí, fue de todos los cantaores el que sabiendo apreciar la variada gama de las musicalidades locales de Almería, logró llevarlas a un grado máximo de perfección tonal, con una técnica, una armonía y una majestuosidad admirable. Chacón hizo grandes los cantes de Levante y de él beberán todos los que vinieron después: El Niño de Cabra, La Niña de los Peines, Manuel Escacena, El Cojo de Málaga, Manuel Torre, Marchena….
En su discografía recoge una pequeña muestra de cantes almerienses. Son las mineras o taranta minera que corresponden al embrión de la melodía que hoy conocemos como taranto y a la primitiva taranta de Almería.
Tal y como señaló José Antonio López Alemán en la mesa redonda, “Antonio Chacón fue un cantaor que ha sido ignorado de alguna manera hasta hace 40 o 50 años, cuando se publica su biografía y Enrique Morente graba un disco reivindicando sus cantes, pero es la figura más importante de la historia del cante flamenco por la cantidad de composiciones propias que acuñó y que muchos después copiarían”.
Antonio Zapata profundizó todavía más en su figura. “Chacón se interesa pronto por esas melodías distintas que escucha en Almería y ya los periódicos hablan en 1893 de unas ‘nuevas cartageneras de Chacón’. No existían hasta ese momento y eran los cantes de Almería que definirá con las primeras grabaciones en 1908, cuando graba siete tarantas, o en 1913 unas mineras que nada tienen que ver con las de La Unión”.
Antes de iniciar su cante, Calixto Sánchez participó en el coloquio explicando que “la forma de cantar de Chacón no era nada fácil por su técnica. Se le entiende, hace tercios largos por la técnica de respiración y esa técnica es la que permite tener una voz rápida y afinada, capaz de hacer rizados y arabescos”.
Ya en el cante, Calixto Sánchez demostró dos cosas. La primera, que a pesar de estar oficialmente retirado nunca rechaza participar en cualquier propuesta que venga desde Almería. Y, segunda, que sigue manteniendo un dominio absoluto del temple necesario para cada cante.
Empezó precisamente con dos cantes de Almería, de tercios largos, de los que no puede hacer cualquiera, ni en el momento de plenas facultades de su carrera. Continuó con dos de los cuatro tipos de malagueñas distintas que grabó Chacón. Y continuó con unos tientos-tangos que maneja con maestría, embaucando en el tempo con los movimientos de sus manos, siempre igual de expresivas.
Finalizaría, a petición popular, por soleás y cerrando por caracoles, otro de los cantes creados por Antonio Chacón. “Es otra de sus creaciones, es una especie de cantiña, pero distinta, porque cambia las métricas de las estrofas. Es un cante que yo no solía llevar en mi repertorio porque en los festivales los solían cantar Fosforito o Chano Lobato y no quería repetir”. Pese a ello, cosechó la gran ovación final para una noche en la que se recordó a una leyenda del cante como Chacón y donde también se volvió a hacer justicia con Calixto Sánchez.