La Diputación Provincial de Almería va a invertir 1.150.000 euros en las obras de consolidación del Hospital Provincial. La Junta de Gobierno de la Institución Provincial aprobó ayer el expediente de licitación de obras de la primera fase de este ambicioso proyecto que tiene como objetivo su puesta en valor y la conservación del edificio fundacional.
Así lo ha anunciado el vicepresidente, Javier A. García, que ha presentado los detalles de este proyecto acompañado de los dos técnicos de la Diputación que se han hecho cargo de la redacción del mismo, Alfredo Garrido e Ignacio Bértiz. Las obras de esta primera fase se van a centrar en la consolidación del edificio, así como en la restitución del estado original de todas las cubiertas y tejados del edificio.
El vicepresidente ha detallado que, una vez adjudicadas las obras, tendrán un plazo de ejecución de nueve meses de duración, en principio, teniendo en cuenta que es un edificio del siglo XVI. Además, ha revelado que las obras cuentan con el visto bueno de la Junta de Andalucía tras las diversas reuniones técnicas que se han abordado entre ambas instituciones.
Al mismo tiempo que se realiza la primera fase del proyecto, se hará el estudio arqueológico del edificio en un plazo de 3 meses. García ha explicado el esfuerzo de la Diputación por darle continuidad a los trabajos. “Podíamos esperar para actuar mientras se hacía el estudio arqueológico, pero la Diputación quiere responder de manera inmediata y va a iniciar la primera fase al mismo tiempo que el estudio arqueológico. Así, la segunda fase podría licitarse en un plazo de cuatro meses”.
Los técnicos de Diputación han adelantado que el proyecto de la segunda fase se encuentra totalmente redactado y listo para su ejecución si no se da ninguna sorpresa a nivel arqueológico, por lo que las obras podrían hacerse de manera continuada.
El vicepresidente ha destacado que esta obra pone de manifiesto “el gran esfuerzo de la Diputación y los técnicos por darle continuidad a esta gran intervención que es única y que supone la restauración del único edificio del siglo XVI que se encuentra en pie en la provincia”.
Esta primera fase supone el 55% del proyecto integral, que cuenta con 2.150.000 euros de inversión global. La segunda fase contaría con 900.000 euros de presupuesto (un 45%) y se podría ejecutar de forma continuada.
Javier A. García ha destacado la apuesta del equipo de Gobierno por esta edificación: “Las obras no sólo buscan la consolidación y conservación, sino que además quieren poner en valor los elementos de interés arquitectónico del edificio para convertirlo en un gran contenedor cultural”.
En este sentido, ha subrayado la buena sintonía que hay con el Ayuntamiento y la Universidad de Almería para lograr que este edificio sea un gran recinto cultural que revalorice el centro histórico, lo dote de vida y tenga un horario continuado. “Hay un interés conjunto de acercar al Hospital las enseñanzas propias de la Universidad. Darle ese uso formativo que sea compatible con salas de exposiciones y convertirlo en un gran referente de la cultura a nivel provincial”.
Por último, el vicepresidente ha recordado el “lamentable” estado en el que la Delegación de Salud entregó el edificio y les ha pedido colaboración en una obra de interés general: “Entendíamos que no podíamos esperar más y por eso decidimos echar a andar y poner elementos para poner en valor este edificio. Pero seguiremos insistiendo para que la Junta colabore con este proyecto por el destrozo que realizó de unas instalaciones que usó durante más de 20 años al tiempo que la Consejería de Cultura lo declaraba como BIC”
Apreciaciones técnicas
Alfredo Garrido e Ignacio Bértiz se han encargado de revelar los aspectos técnicos de un proyecto que se concibió como un documento único y que con el fin de acelerar el proceso se ha decidido dividir en dos fases que tendrán que ser ejecutadas por una empresa especializada en la intervención del patrimonio.
El proyecto pretende asegurar la integridad del conjunto de tejados, garantizar la estabilidad de los faldones de teja y garantizar la impermeabilidad del conjunto. Además, corregir el vertido de aguas pluviales desde las cubiertas hacia la red de saneamiento sustituyendo los canalones y bajantes actuales.
Para ello, la obra incluye el desmontaje general de toda la teja original que aún se conserva, así como el desmontaje selectivo de la tablazón que exista bajo ella y que se encuentre en estado de deterioro físico siendo imposible su conservación. Los técnicos han revelado que se va a tratar de conservar todas las piezas y que se está buscando a un especialista en cerámicas para poder hacer réplicas de las mismas en aquellos tramos que no sean recuperables.
Los técnicos han desvelado que además de la “intervención garantista” la obra se verá acompañada de otra complementaria que tiene que ver con la restitución de la configuración general del conjunto de cubiertas y tejados: El paso del tiempo ha provocado que se hayan ejecutado mutilaciones y ampliaciones que se ejecutaron sobre todo en el siglo XX, y que distorsionan la lectura del bien que fue objeto de catalogación.
Por ello, será necesario demoler los pabellones y castilletes que han desdibujado la configuración original de las cubiertas, en forma de “U”, y de igual forma se repondrán tramos que fueron seccionados para generar pequeñas terrazas para instalar depósitos de agua y otros servicios.
Además de esta actuación integral de las cubiertas, se llevarán a cabo otras obras menores. Se considera necesario acometerlas en este momento -junto con las cubiertas- para garantizar la seguridad física de algunos elementos constructivos dispersos por diferentes zonas del Hospital, y que amenazan caída, rotura, falta de estabilidad o ruina, y por añadidura, se pretende velar por la seguridad de las personas.
Estas obras menores son:
• Retirar forjado que cubre el mortuorio en el sótano del pabellón sur. Esa tarea será ejecutada con seguimiento arqueológico.
• Sustituir forjado de la cubierta que cubre el castillete situado sobre la escalera de subida. Esa tarea será ejecutada con seguimiento de restaurador.
• Para evitar el colapso del forjado de la terraza situada en planta primera y que se abre al sur, hacia el “patio del ficus”, se propone su eliminación. Oculta la fachada meridional original del edificio, levantada por Machuca y Munar en el s.XVIII. Esa tarea será ejecutada con seguimiento arqueológico.
• Se retirarán del interior del edificio los falsos techos recientes y otros elementos sobrantes como las tabiquerías modernas, en el caso de de los techos que cubren artesonados será ejecutado por un restaurador.
• Para de evitar la ruina del castillete de la cubierta del Pabellón de San Antonio levantado en 1927, se propone su desmontaje y sustitución. Como se va intervenir en ese Pabellón, también se demolerán los falsos techos y los tabiques modernos.