La Diputación Provincial de Almería ha entregado esta mañana en el Castillo de San Andrés de Carboneras las distinciones del ‘Día de la Provincia’, una fecha, que este año se ha hecho coincidir con los actos conmemorativos del bicentenario de la creación del primer Ayuntamiento Constitucional en el municipio. Como cada año, la Diputación ha entregado sus máximas distinciones con el objetivo de poner de manifiesto los referentes históricos, sociales y culturales de Almería, y una forma de afianzar los lazos de hermandad entre los diferentes municipios de la Provincia.
La edición de este año ha reconocido con la Medalla de la Provincia a la Virgen del Mar y además ha entregado galardones a la Asociación de Padres de Niños y Adolescentes con Cáncer, Argar, en lo social, a los hermanos José y Juan Muñoz en los deportivo y al pintor Antonio López en el apartado cultural.
Al Castillo de San Andrés han acudido el presidente de la Diputación de Almería, Gabriel Amat con las Corporaciones Provincial y del Ayuntamiento de Carboneras en pleno además de alcaldes y concejales de la provincia, autoridades civiles y militares y representantes de distintos sectores empresariales de la sociedad almeriense. El presidente de la Diputación ha querido destacar la labor de las personas “que hoy se reconocen y que trabajan para engrandecer la provincia”. Amat ha recordado el gran trabajo de los hermanos muñoz “que han conseguido que la provincia de Almería sea reconocida a través del ciclismo”.
El presidente ha reseñado también la gran trayectoria de Antonio López, “un pintor de gran importancia que una vez más ha querido brindarnos su presencia en la provincia en un día tan señalado”. Gabriel Amat ha tenido también una palabras para Juana García, de Argar, “que ha tenido las puertas abiertas de las instituciones porque siempre ha trabajado para el beneficio de los niños de la provincia”. Por último, el presidente ha querido destacar que el gran orgullo “de conceder la máxima distinción de la provincia a la madre de todos los almerienses”.
Por su parte, el alcalde, Salvador Hernández ha señalado que “carboneras es un premio luminoso, pesquero y turístico que nació a partir de este Castillo que se construyó para defender la costa almeriense de las invasiones moriscas y desde ahí ha ido creciendo siempre mirando al mar”. “Siempre hemos sido un pueblo pesquero, pero a la pesca hemos sumado la industria y el turismo y nos enfrentamos al futuro mirando cara a cara al progreso”. Por último, Salvador Hernández ha destacado que “este acto viene a culminar un año muy intenso de actividades con motivo de nuestro bicentenario y por ello queremos dar las gracias a la Diputación por haber elegido nuestro municipio para celebrar el día grande de la provincia”
Medalla de Oro de la Provincia: Virgen del Mar
La Medalla de la Provincia de Almería ha recaído sobre la Patrona de la capital, la Santísima Virgen del Mar. Se trata de la insignia más destacada que concede la Institución Provincial y, según Amat, esta imagen mariana es merecedora por la devoción que produce en todos los rincones de la provincia de Almería.
Su devoción se remonta a 1502 cuando el torrero de la playa de Villagarcía encontró su imagen en la playa, cerca del Alquián; una talla del siglo XV, procedente, con toda probabilidad, de la capilla de la cámara de popa que era común en las embarcaciones de la época. La imagen fue entregada por el responsable de la torre al prior de la orden de Santo Domingo, congregación religiosa de predicadores que había llegado a Almería, a partir de 1498 unida al esfuerzo reconquistador de los Reyes Católicos. Poco a poco, aquella imagen, tallada en nogal, policromada y de estilo gótico tardío, que los dominicos colocaron en el camarín del primitivo templo, fue objeto de interés y de devoción por los almerienses quienes comenzaron a llamarla con el título “Del Mar”.
En siglo XVIII es declarada Patrona de la Ciudad, patronzazo que fue aprobado por el papa Pío VII en 1806, de tal forma que, de mutuo acuerdo el Cabildo Catedral y el Ayuntamiento se celebraron por primera vez las fiestas patronales en 1807, con la concesión de Feria y Mercado otorgada por Carlos IV.
Ya en 1520, a instancias de los priores de los conventos de Santo Domingo y de la Trinidad, se creó la Hermandad o Cofradía de la Virgen del Mar, estableciéndose unos Estatutos con 16 Capítulos que contemplaban en sus objetivos la fraternidad de los miembros, el culto a La Virgen y la ejecución de obras de misericordia, en especial, la atención a la numerosa población de enfermos. La historia de Almería está unida a la Virgen del Mar desde hace más de quinientos años, aglutinando a los almerienses en una espiritualidad religiosa común de expresión individual y colectiva que congrega a miles de almerienses en sus actos; quinientos años en los que con la fe, el amor y el compromiso espiritual que les caracteriza, ha sido custodiada por la orden de los Dominicos almeriense.
En su nombre, ha recogido la medalla el Prior de la Orden De los Dominicos de Almería, Fray Antonio Bueno Espinar, que ha destacado “la alegría con la que la que los Dominicos recibimos esta distinción, a la que estamos tan vinculados que no podemos entender nuestra presencia en Almería sin la imagen de la Patrona”. “Almería es un todo apiñado en torno a la Virgen del Mar que es la madre de la provincia entera y donde quiera que se encuentre un hijo de esta tierra, la Virgen del Mar lidera su devoción”.
Medalla a la Cultura: Antonio López
Para la Medalla a la Cultura, ha sido este año para el máximo exponente del hiperrealismo: el pintor castellano manchego Antonio López. La estrecha relación que ha ido adquiriendo con Almería y más en concreto con el Museo Casa Ibáñez de Olula del Río, ha situado a la provincia en lo más alto del mapa de las Artes Plásticas. El artista imparte uno de los Cursos de Pintura con mayor trascendencia del país en esta pinacoteca y desde 2012 cuenta con una sala en su honor en este centro cultural, que fue inaugurada por el presidente de la Institución Provincial. Además, Antonio López ha tenido el gesto admirable e impagable de donar 7 obras al Museo que suponen una importante aportación a sus fondos y al patrimonio de todos los almerienses.
Antonio López a uno de los más reconocidos artistas internacionales. Nacido en Tomelloso en 1936, realizó estudios en la Academia de Bellas Arte de San Fernando y expuso por primera vez 1955. Es académico de número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y entre sus numerosas distinciones y premios posee el Príncipe de Asturias de las Artes que en 1985 reconocía, entre otros méritos, su maestría y la conciliación de la tradición realista con la contemporaneidad. Su obra Madrid desde las Torres Blancas, subastada en Christie´s, logró la cantidad mayor pagada por una obra de artista español vivo.
Enraizado en la cultura pictórica española, pero con una evolución y aportación únicas, afirma que “de vez en cuando necesita ver a Velázquez”. No podía ser de otra manera: en 2008 el Museo de Bellas Artes de Boston hace compartir sus cuadros al par que el Greco y Velázquez en una exposición sobre los valores artísticos de la España de Felipe III y Felipe IV.
El es un hombre humilde, tranquilo -muy a lo “machado” se ha dicho-, que tiene en el trabajo diario la sustancia de su vida, entre el estudio, los talleres de fundición y Madrid, su constante, la ciudad que le apasiona, sus espacios y sus ausencias. Su exigencia intelectual y técnica hacen de él un trabajador infatigable pues, como le gusta decir: “una obra nunca se acaba hasta que llega al límite de las propias posibilidades”.
En su intervención, Antonio López ha agradecido este homenaje y destacado que “desde mi primer viaje a Almería, mi amistad con vuestro pintor Andrés García Ibáñez, me ha devuelto a esta provincia donde he compartido el amor a nuestra profesión, la pintura, con los integrantes de los talleres organizados en Olula del Río”. “Admiro vuestro coraje y vuestra generosidad y me siento tremendamente identificado con Almería”, ha concluido el pintor
Medalla del Deporte: José y Juan Muñoz
La Medalla del Deporte este año ha sido para José y Juan Muñoz, conocidos en el mundo del ciclismo como los Hermanos Muñoz. Ellos son el alma y el corazón del evento ciclista más importante de la provincia y uno de los de mayor relevancia nacional e internacional: La Clásica Ciclista de Almería.
D. José Manuel y D. Juan Muñoz López han realizado una larga y esplendida labor de promoción del ciclismo; una trayectoria que se inicia en 1984 con la creación de la Peña Ciclista, entre un grupo de amigos que pasaban sus ratos de ocio dedicándose a la bicicleta. La afición, el amor y la entrega a este tradicional deporte les llevó a organizar por primera vez La Clásica en 1986 como una prueba amateur que llegaría a ser profesional a partir de 1992. Su constante y meritorio trabajo, capaz de aunar, motivar y comprometer a organizaciones, instituciones, empresas y medios de comunicación y su indudable profesionalidad a la hora de organizar la prueba, hicieron de La Clásica un excelente escaparate de nuestra tierra.
La Clásica de Almería formaba parte desde el 2005 del UCI Europe Tour en la categoría 1.1 ascendiendo el pasado año a la 1.HC, la máxima categoría de estos circuitos. Después de tres décadas de historia La Clásica tiene el mérito de haber difundido los valores de nuestra Provincia a nivel internacional a través del ciclismo, con la presencia en Almería de nombres ilustres del panorama internacional y de la historia del ciclismo, intentando siempre que la carrera discurra por la mayor parte de municipios posible de toda la provincia. A ello hay que añadir la imagen de la clásica como ejemplo de perfecta organización y del trabajo del que los almerienses somos capaces.
José Manuel Muñoz ha señalado que “es un honor recibir esta medalla por el trabajo que venimos haciendo durante muchos años y que hacemos con la ilusión de trabajar para engrandecer el ciclismo que es nuestra gran afición”. Muñoz ha destacado que “queremos compartir este premio con todas las personas que trabajan por el deporte de forma desinteresada en toda la provincia y con toda la sociedad almeriense”.
Medalla Social: Asociación Argar
La Asociación de Padres de Niños y Adolescentes con Cáncer de Almería ha recibido este año la Medalla de lo Social por suponer un ejemplo de trabajo desinteresado y mejorar la calidad de vida de los afectados por esta enfermedad. En 1995 un grupo de padres con hijos enfermos de cáncer funda en Almería esta asociación de carácter benéfico y sin ánimo de lucro, calificada de Ayuda Mutua, declarada de Utilidad Pública por Orden del Ministerio de Interior en 2006 y cuyos objetivos son cubrir las necesidades y conseguir los mejores niveles en el tratamiento y la calidad de vida de estos pacientes y de sus familiares.
Argar es miembro de la Asociación Española de Padres de Niños con Cáncer y de la Confederación Internacional de Padres de Niños Oncológicos. Desde su creación, su trayectoria contempla un largo camino de esfuerzos, de trabajo, de concienciación y de colaboración con las administraciones sanitarias en la consecución de recursos, como la inauguración de una casa de acogida para las familias que tienen que desplazarse, la puesta en funcionamiento de la Unidad de Cobalto-terapia para evitar desplazamientos, el hospital de Día Pediátrico, el incremento de del profesorado de las aulas hospitalarias…; actuaciones que tienen como corolario el acuerdo, en 2003, con Hospital Torrecárdenas para la puesta en funcionamiento del área de Oncología Infantil.
La asociación reúne a casi 200 familias a las que ofrece atención social y psicológica a través de recursos económicos y técnicos, dispone de un esforzado voluntariado y realiza campañas de información y concienciación, fundamentalmente para la captación de donantes de médula ósea, su vez que colabora económicamente en un proyecto europeo sobre el neuroblastoma.
El premio ha sido recogido por la presidenta de Honor de la Asociación, Juana García Olivares, que ha señalado que “es un honor, no solo para mi, sino para todo el grupo de padres que trabajan y conforman la asociación”. “También me gustaría destacar a nuestro equipo de voluntarios, trabajadora social, psicólogos y todos los que contribuyen a esta labor que, tras estos 20 ha contado con la colaboración de, empresarios, políticos y personas de a pie, que nunca me han dicho no cuando he pedido ayuda”. “Esta medalla es para los padres que están luchando y para los niños que están, y para los que ya no están”, ha concluido García.