La Diputación Provincial de Almería ha aprobado la compra de ‘El Cortijo del Fraile’ y su entorno: casi nueve hectáreas de superficie. Se trata del último paso administrativo antes de que el emblemático edificio del siglo XVIII pase a ser titularidad de la Diputación Provincial para su rehabilitación y puesta en valor como epicentro cultural del Levante y del Parque Natural Cabo de Gata – Níjar.

La Junta de Gobierno aprueba su compra por un importe de 1.950.000 € con el objetivo de rehabilitar este bien patrimonial para todos los almerienses

Tras superar todos los trámites legales y administrativos, la transferencia de la propiedad se producirá próximamente con la firma de las escrituras del BIC y de su entorno

El objetivo de esta iniciativa del presidente, Javier A. García, y el equipo de Gobierno de Diputación, es la restauración de este emblemático edificio, catalogado como Bien de Interés Cultural que se encuentra en estado de ruina técnica desde el año 2011. De este modo, la Institución da el paso definitivo en su compromiso por la recuperación del patrimonio artístico, histórico y cultural de la provincia de Almería.

Desde que el 16 de septiembre de 2021 se iniciara la tramitación del expediente, la Diputación ha salvado cerca de una treintena de trámites administrativos hasta la compra por un importe de 1.950.000 euros que culminará con la firma de escrituras de la propiedad de estas fincas.

El vicepresidente de Diputación ha resaltado que la recuperación y puesta en valor de este inmueble, un referente icónico para el imaginario cultural, costumbrista y etnográfico almeriense y del campo de Níjar, se llevará a cabo desde lo público para convertirlo en un gran espacio cultural a disposición de todos los ciudadanos y visitantes.

Tras la firma de las escrituras, trámite por el que se da formalizada la adquisición, la Diputación iniciará la redacción del proyecto para recuperar este icónico enclave “desde lo público” para todos los almerienses y turistas. “Queremos que se convierta en un gran contenedor cultural y turístico. Un espacio que pueda disfrutar toda la ciudadanía”.

La adquisición y puesta en valor de ‘El Cortijo del Fraile’ se suma a la obra patrimonialista más importante que se ha acometido en la provincia: el Antiguo Hospital Provincial. La Diputación está liderando las obras de restauración del único edificio del siglo XVI que se mantiene en pie en la ciudad para su reconversión en el Primer Museo del Realismo Español Contemporáneo.

Durante la visita del consejero de Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, Antonio Sanz, el presidente le trasladó todos los detalles sobre la compra de este bien patrimonial y la solicitud de colaboración a la Junta de Andalucía para recuperar este inmueble para todos los almerienses.

Sobre el Cortijo del Fraile

‘El Cortijo del Fraile’ fue construido por los frailes dominicos en el siglo XVIII, debe su nombre a quienes lo levantaron. En la desamortización de Mendizábal en 1836 fue confiscado por el estado y pasó a manos privadas.

Debido al horno de pan que albergaba, y en el que se elaboraba pan para buena parte de la comarca, se le conoció durante mucho tiempo como el Cortijo del Hornillo. Es el más grande y espectacular del Parque Natural que ha servido de inspiración a poetas, escritores, pintores, fotógrafos y cineastas.

El mágico entorno del ‘Cortijo del Fraile’ ha sido localización de diferentes rodajes como ‘La Muerte tenía un precio’ y ‘El Bueno, el Feo y el Malo’. Además, se han grabado en él algunas series de televisión, como el final de la sexta temporada de Los Hombres de Paco.

Pero sobre todo, el ‘Cortijo del Fraile’ ha pasado a la historia por ser el escenario donde se produjo el ‘Crimen de Níjar’ que años después inspiraron a Federico García Lorca para la universal obra ‘Bodas de Sangre’ y a la escritora almeriense Carmen de Burgos para su novela ‘Puñal de Claveles’.

El ‘Cortijo del Fraile’ forma parte de un conjunto edificado de planta trapezoidal, con una superficie de parcela de más de tres mil metros cuadrados. El conjunto arquitectónico cuenta con una vivienda principal, de los aparceros y del pastor, oratorio, corrales, cuadra y corrales. En su interior, concretamente en su patio central, podemos encontrar el campanario, la cripta funeraria, la capilla, las cuadras, los hornos y el aljibe.