La Diputación Provincial de Almería ha celebrado esta mañana en Canjáyar, en la Plaza Nueva, conocida como la Plaza del Parralero, un simbólico acto en el que se han repartido 1.200 cepas de parras procedentes de más de veinte variedades de la provincia de Almería, donde la cultura parralera representa uno de los capítulos más destacados de la historia agrícola, comercial y cultural de numerosos pueblos almerienses.

La Institución Provincial y el Grupo Ecologista Mediterráneo entregan en Canjáyar 1.200 cepas de parras con el objetivo de preservar las raíces uveras de los pueblos almerienses

Con el objetivo de que ese legado nunca caiga en el olvido, y que sean los propios almerienses quienes se impliquen en la conservación de las uvas de origen autóctono, se lleva a cabo esta iniciativa que se enmarca en el proyecto Biodiversidad Domesticada, que impulsa el Grupo Ecologista Mediterráneo. Se trata de un proyecto que busca, localiza y rescata especies cultivadas de forma tradicional en los distintos territorios agrícolas almerienses.

El diputado de Promoción Agroalimentaria, Antonio Jesús Rodríguez; la diputada del Plan de Fomento del Empleo Agrario, Matilde Díaz; el alcalde de Canjáyar, Juan José Romera y representantes del GEM como Antonio Rubio, responsable del proyecto Biodiversidad Domesticada, han participado en un acto previo al reparto de las parras.

En este sentido, el diputado de Promoción Agroalimentaria ha felicitado al GEM por su proyecto de Biodiversidad Domesticada que “cuenta con el apoyo de la Diputación de Almería porque conecta con varios de los principales objetivos que tenemos como institución. Por un lado, defiende la cultura, tradición y memoria de nuestros pueblos vinculada a la uva, que fue durante muchos años el principal pilar económico de nuestra tierra y, por otro lado, supone un impulso a nuestra agricultura a través de un proyecto medioambiental apasionante”.

Asimismo, el diputado ha señalado que la Diputación Provincial, a través de la marca gourmet ‘Sabores Almería’, apoya esta iniciativa que “supone un homenaje a nuestros antepasados, a nuestros mayores, a los hombres y mujeres que con su esfuerzo han hecho que hoy la provincia de Almería sea una tierra próspera, llena de oportunidades. Es una historia de la que nos sentimos plenamente orgullosos”, y ha felicitado a Canjáyar por acoger este año el reparto de parras y ser un ejemplo con las actividades que programa en la lucha contra la despoblación.

Por su parte, el alcalde de Canjáyar ha explicado que “este evento significa mucho para nuestro pueblo porque hemos vivido tradicionalmente de la uva durante muchos años y siempre hemos tenido mucha faena y los vecinos tienen numerosas anécdotas y recuerdos de la uva. Recordamos nuestro pasado y conectamos a las nuevas generaciones con esta parte de nuestra historia. Si las parras no se conservan por los ciudadanos se terminarán perdiendo”.

El responsable del proyecto Biodiversidad Domesticada, Antonio Rubio ha definido este acto de Canjáyar como “una gran fiesta para la agricultura almeriense porque con esta celebración preservamos la biodiversidad de una agricultura que tiene más de 300 años de historia y que forma parte de la vida de los almerienses. El cultivo de parral siempre ha sido el que ha tenido más importancia en el campo almeriense y hoy repartimos 1.200 parras de veinte variedades para proteger y cuidar nuestra biodiversidad agrícola”.

Entre las variedades que se han distribuido hoy en Canjáyar se encuentran las de ojo de buey, albilla real, del barco, cojón de gato, colorá de colgar, de Lanjarón, Napoleón, del cuerno, la molinera, la rosada de Rágol, moscatel de Alejandría…, hasta superar una veintena de parras diferentes.