La Diputación Provincial y el Ayuntamiento de Almería han iniciado hoy el derribo del viejo cortijo que ocupa la parcela del futuro Museo de la Vega de la Ciudad de Almería. El vicepresidente, Ángel Escobar, y la edil de Urbanismo e Infraestructuras, Ana Martínez Labella, han asistido hoy a este hito que marca el inicio de las obras de ese proyecto que se convertirá en realidad gracias a los Fondos Europeos. Una vez culminada la demolición, comenzarán las obras de construcción que cuentan con un plazo de ejecución de 18 meses.
El vicepresidente y la concejala de Urbanismo e Infraestructuras han asistido a este hito que marca el inicio de las obras de este proyecto que será realidad gracias a los Fondos Europeos Este proyecto cuenta con 1.350.000 € de inversión para la construcción del Ecomuseo con cafetería, placeta de juegos infantiles, talleres y actividades
El proyecto, tramitado por la Diputación, se enmarca dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (EDUSI) del Bajo Andarax, y cuenta con una inversión de 1.350.000 euros de inversión para las obras del Ecomuseo que se ubicará sobre una parcela de más de 7.300 metros cuadrados que se encuentra dentro del Parque del Andarax. A su vez, esta obra se enmarca dentro de la EDUSI Bajo Andarax que cuenta con un presupuesto global de 18,75 millones de euros financiado por el Programa Operativo FEDER de Crecimiento Sostenible 2014-2020 (80%), y los fondos propios de la Diputación Provincial de Almería (20%). El futuro ‘Eco-Museo’ reinterpretará el ‘cortijo-tipo’ con un interior musealizado que va a recrear el estilo de la vida de los vegueros con el objetivo de mostrar el enorme contraste entre los paisajes y los estilos de vida de esa zona hace unos años y en lo que se ha convertido ahora.
El vicepresidente ha subrayado que la ejecución de este proyecto es el máximo exponente de la colaboración entre administraciones para seguir mejorando las infraestructuras municipales de la Ciudad de Almería. “Diputación ha tramitado este proyecto dando voz a la apuesta decidida del Ayuntamiento de Almería por recuperar y poner en valor esta zona de la capital con un Museo de la Vega que completa los equipamientos y la oferta del Parque del Andarax. El objetivo de esta obra es recuperar las tradiciones de la Vega y que los almerienses y turistas disfruten de la Vega”. Escobar ha detallado que gracias a la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado “vamos a gestionar 18,75 millones, de los que 15 proceden directamente de Fondos Europeos para financiar un proyecto global que tiene como pilares el Fomento de Infraestructuras de Movilidad Urbana y Sostenible, energías renovables y la puesta en valor del patrimonio cultural y etnográfico, agrícola de la Vega del Bajo Andarax”. Asimismo, ha resaltado “la importancia de unos Fondos Europeos que están contribuyendo a mejorar la zona metropolitana y la Vega con proyectos que pretenden la puesta en valor para transformar económica y socialmente la ciudad”. Por su parte, Ana Martínez Labella se ha congratulado del paso hoy dado, que pone en línea de salida la construcción de un nuevo espacio museístico en la ciudad, en el corazón agrícola de la capital. El Museo de la Vega va a ser una realidad además de la mano de los hombres y mujeres que han dado vida y sentido a la Vega, rememorando en él lo que ha sido una forma de vida y raíz del modelo económico que sustenta en gran parte esta provincia. La edil popular ha subrayado además la importancia de la colaboración entre administraciones, en este caso y una vez más entre Ayuntamiento de Almería y Diputación Provincial, en el desarrollo de proyectos, la ejecución de infraestructuras y la construcción de nuevas dotaciones en beneficio de los almerienses.
Objetivo: Recuperar los valores etnográficos de la Vega
Esta demolición es necesaria por los problemas estructurales con los que cuenta la antigua casona. Se trata de un ‘cortijo-tipo’ que será edificado sobre una parcela con una superficie de 7.305 metros cuadrados. Acogerá los valores etnográficos de la Vega, desde la primera parte del siglo XX hasta los años 50. Tendrá cafetería-restaurante, una placeta de juegos infantiles, talleres y actividades. Con una superficie de 426 m2, en el interior del edificio podrán exhibirse enseres de un cortijo de la época de la subsistencia, podrán realizarse recreaciones de las dependencias con las que contaba este tipo de edificaciones, exponerse maquetas de construcciones tradicionales, etc. Además de la zona expositiva, interactiva y pedagógica, y atendiendo a la posibilidad de una futura ampliación del edificio, esta primera fase contempla además la disposición de zona de conferencias/educativa, administrativa y de servicios, completándose esta fase con la urbanización del entorno próximo del edificio y de los accesos al mismo desde el exterior de la parcela.